La visita a la Laguna de Uña y su entorno nos llevará a conocer un rincón muy especial de la Serranía Conquense.

La laguna se formó por el cerramiento natural del valle por una toba calcárea. El microclima generado permite una elevada diversidad botánica.

El valle alberga un gran número de especies de aves. Las acuáticas son observables desde los miradores de la laguna, mientras que en las impresionantes paredes calizas del cañón que la rodea, tiene su cobijo una nutrida comunidad de buitre leonado y otras especies de rapaces.

En nuestra visita, mediante una pequeña ruta alrededor de la laguna, podremos disfrutar de un bello marco geológico y paisajístico y de la diversidad vegetal y animal del entorno. Desde los miradores observaremos la avifauna de la laguna y de los paredones cercanos.

Camino de Cuenca visitaremos el famoso mirador de El Ventano del Diablo, sobre el río Júcar.